En la vida del Padrino del Soul, James Brown, no solo hubo hueco para el hedonismo (“Sexmachine”) o para la joie de vivre (“I feel good”). Acaso menos conocido pero tremendamente potente es este “Say it loud, I´m black and I´m proud” (“Dilo alto, soy negro y me siento orgulloso”) que hoy es nuestro temazo de la semana.
Nos remontamos a finales de los sesenta a unos Estados Unidos en los que los Movimientos por los Derechos Civiles tratan de mitigar el racismo congénito de determinados sectores de su población (especialmente en el sur). Malcolm X, las Panteras Negras, Martin Luther King… época en la que los afroamericanos sufrían pero al mismo tiempo luchaban codo con codo para reivindicar libertad y respeto.
James Brown, en su condición de líder artístico, se sumó a la causa con este tema simple pero muy efectivo que deja un aire como de primitivo hip-hop. La primera grabación la llevó a cabo junto a un grupo de niños de Los Ángeles por el procedimiento de la pregunta y la respuesta (-“Dilo Alto”; -“Soy negro y estoy orgulloso”). Un estilo que luego cundió en el Funk. Fue, de paso, la primera vez que Brown interactuó con el genial trombonista Fred Wesley, que luego sería fundamental en su carrera durante años.
Con el paso de los años, Brown fue escondiendo un poco este tema de sus actuaciones porque, como escribió en su autobiografía, la canción se le hizo “obsoleta” (aunque nunca obvió la importancia que tuvo como himno para toda una generación).
Obviamente, en aquellos tiempos este tema sufrió toda clase de censura en emisoras controladas por determinados sectores rancios de la América profunda pero –como suele terminar pasando- la razón y el arte se impusieron a la insensatez. Hoy podemos escucharla sin que, por desgracia, el tema haya perdido en algunas mentes cerriles su necesaria vigencia. Que la disfruten.
Toni Cruz 