El compositor de este temazo que hicieron mundialmente célebre los Troggs en el 66 fue un neoyorquino llamado Chip Taylor. Este caballero, todo un personaje, se forró con la canción y luego lo despilfarró apostando en Las Vegas –durante años dicen que se jugaba unos diez mil dólares al día-. Por cierto, le echaban todos los casinos por contar las cartas. No le servía de nada ser un buen cliente.
Normal, pues, que un tipo así –por cierto, tío de Angelina Jolie– compusiera un himno a una cosa (¿mujer?) salvaje. La letra tiene pausas que no es que sean precisamente silencios medidos. Como explicó en 2008 al Mojo Magazine: “Wild Thing nació en cuestión de minutos. Las pausas durante la canción son debido a no saber cómo iba a continuar la letra”. Honestidad brutal.
La canción es una mezcla de estilo garage con el rock. The Troggs (cuyo nombre original eran “The Troglodytes”) grabaron la canción en Londres, pero su fama cruzó rápidamente el Océano. Así, en julio del 66 llegó al número uno en América.
El original sonido de la ocarina junto a una letra simple pero potente (“Cosa salvaje/creo que te quiero/ pero quiero saber a ciencia cierta / ven y abrázame fuerte/ te quiero”) y a los acertados riff de guitarra la hicieron fácilmente reconocible para el público. Y aún la hacen.
Versionada por grandes como Jimi Hendrix, Amanda Lear o Aerosmith ocupa el puesto 261 en la lista de temazos de todos los tiempos de la revista Rolling Stones.