Semana de debate estéril y, esperemos, inocuo. ¿Jugamos mejor jugando más feo? ¿Hemos optado por la renuncia al preciosismo en pos del resultadismo? ¿Es necesario generar más fútbol de ataque para conseguir nuestro objetivo?
De lo único que realmente deberíamos preocuparnos es de que el barco no desvíe su rumbo. Si algo pudo inquietar de la visita del Bilbao Athletic no debería ser el escasísimo caudal ofensivo generado por los nuestros en la segunda parte, sino que el rival nos creó algo más de inquietud que, por ejemplo, la Ponferradina.
Lo demás, está de más si tenemos en cuenta la fantástica situación (no sobra recordarla: diez puntos de los últimos doce, cero goles encajados, cuartos en la clasificación) y la solidez de conceptos que está evidenciando el unido grupo de Oltra.
En el Anxo Carro no sería bueno que se jugara mucho al fútbol. Me justifico. Si el partido se desarrolla por las vías del toque, Luis Milla tiene mucho que ganar. Si se impone la fuerza pura del Córdoba en el centro -máxime si como se presupone el campo puede estar pesado por la mucha lluvia caída durante la semana en Lugo-, el camino del cielo se abriría para los visitantes.
Las bajas, importantes, no son excusa porque también las sufre el rival. Al Córdoba le falta su portero titular, su central más en forma y uno de sus arietes; al Lugo su central más experimentado (Carlos Hernández) y su habilidoso medio Iriome, aunque ha podido recuperar a última hora a su cerebro, Carlos Pita.
Oltra, pragmático ante todo, tocará poco el once. Para despejar dudas ha dejado en tierra a Dalmau, de quien se podría pensar que tendría opciones en el lateral. En su lugar convocó al central Fran Serrano, que será el suplente de Gálvez y que hará que Stankevicius mantenga su puesto de lateral diestro. Luso ocupará de nuevo su puesto en el centro del campo mientras que la baja de Andone será cubierta con el esperanzador retorno de Xisco Jiménez.
Que nadie se vuelva loco. El Córdoba nunca venció en Lugo cuando quiso jugar a lo mismo que su rival. Es más, ningún equipo le dio una mayor lección de fútbol al Córdoba en los últimos tiempos -obviando el deambular por Primera, claro- que el Lugo de Setién. Como el discurso de los estetas que se han postulado por el fútbol de salón en Segunda cale… perderemos seguro.
Vamos a sacarle diez puntos de ventaja al séptimo y entonces, si acaso, debatimos sobre el discurso del método o sobre el sexo de los ángeles si hace falta.
Si queréis escuchar mi narración íntegra del partido para Cordobesismo Radio, pinchad aquí.
Toni Cruz 