Sucedió un 30 de diciembre, una fecha en la que en estos tiempos pasan pocas cosas en el fútbol profesional. El Córdoba C.F. recibía al Atlético Sanluqueño en partido de la decimoséptima jornada del grupo Tercero de Segunda B. No iba bien el equipo que entrenaba Juan Verdugo -apenas fuera del descenso por dos puntos- y su rival estaba a su mismo nivel clasificatorio. Y, como casi siempre, las cosas se pusieron peor esa tarde fría en El Arcángel. El Sanluqueño de Buenaventura acabó venciendo esa tarde 1-2 a un Córdoba en el que se alineaban Saco, Momparlet, Paco Jémez, Ortega, López Murga, Portugal o Anquela (que marcó esa tarde) entre otros. Por parte de los de Barrameda inauguró la cuenta en el minuto diez un futbolista llamado Dieguito. Que tiene su historia.
Diego Garrido Valencia, Dieguito, nació en el barrio de Santiago de Jerez hijo de -y cito un artículo del Diario de Jerez– “Diego Garrido González, tío de La Paquera, que fue un gitano con mucho garlochí y mucho paladar”. Su madre fue Luisa la de Torrán, a quien se la define en el mismo reportaje de una manera muy estética: “cuando levantaba los brazos y los ponía en movimiento, las bulerías se le trenzaban y destrenzaban entre sus manos de gitana con mucho arte, acumulado en los genes, desde siglos atrás. Bailaba para rabiar. De bien para arriba; que mejor ya era casi imposible”.
De tal palo, no quedaba otra, tal astilla. Cuando tenía trece años un aficionado al flamenco cordobés llamado Andrés Raya vio al niño Diego García bailar en Madrid. Entonces era más conocido como “Dieguito el de la Margara” y al que “daba gloria verlo bailar por bulerías”.
La familia Garrido Valencia estaba compuesta por diez vástagos de los que dos terminaron de futbolistas. Juan Garrido también tuvo oportunidad de debutar con el Xerez, pero Dieguito llegó más lejos.

Los primeros pasos de Dieguito en el baile y el fútbol fueron simultáneos. Con trece ya derrochaba arte en Madrid y el Cervantes, club de fútbol base del que dio el salto al Xerez C.D. Tras debutar en Segunda B como xerecista y cumplir con el servicio militar precisamente en Cerro Muriano (“enchufado, porque al ser futbolista podía seguir jugando”) recala en un Cádiz recién ascendido a Primera por mediación de Manuel Irigoyen. Su estreno fue inmejorable, porque marcó un gol al Sevilla que le permitió al Cádiz conquistar su primer Carranza (1981). Vivió seis temporadas intensas en un Cádiz ascensor –dos veces subió y dos bajó en ese periodo– y lleno de futbolistas carismáticos. De Mágico González, con quien compartió vestuario, dijo que era “un genio que hacía cosas anormales con un balón. Había veces en el vestuario que me decía, estoy mal, Diego, pero luego en diez minutos la formaba, porque había partidos en los que no cogía un balón, pero cuando destapaba el tarro de las esencias era de olé. Era como un cante de la Paquera, o como un capotazo de Paula. A él le encantaba el flamenco y me pedía de vez en cuando que diera una pataíta en el vestuario. Gustándole Camarón no podía ser malo”.
A pesar de su pasado cadista a Dieguito le aceptan de vuelta en su tierra en la 86-87 y también logró hacer historia de azulino anotando el primer gol oficial -al Mollerussa- en el recién estrenado Chapín. Su carrera se fue consumiendo entre Segunda B y Tercera en otros equipos de la tierra como el ya comentado Sanluqueño, Jerez Industrial y San Fernando.

Dieguito ahora trabaja para la delegación de deportes del Ayuntamiento de Jerez. Sigue bailando y, si le sale algo, lo acepta aunque ha asumido que únicamente de su pasión no puede vivir. También ha asumido que ya no quedan muchos futbolistas que puedan dedicarse a bailar sobre el campo. “Yo era de los de amagar, como en la bulería. Siempre hay que ir al amago tanto en lo uno como en lo otro”, le contó una vez a La Voz del Sur. Tampoco cree que el fútbol de sus tiempos se parezca demasiado al de ahora, como confesó en el Diario de Sevilla: “creo que lo que falta es un poquito de pellizco. Ahora es todo muy metódico y a mí particularmente me gusta que la gente se equivoque. No digo que no haya genios, que sí los hay, pero como está todo tan controlado…”
Fuentes:
https://www.diariodesevilla.es/entrevistas/Ahora-centrales-futbol-parecen-modelos_0_1114689178.html
http://memoriaflamenca.blogspot.com/2012/11/dieguito-el-de-la-margara.html
https://www.facebook.com/950015988366684/posts/1062675610434054/
https://www.diariodejerez.es/opinion/articulos/muerto-bailaora-Jerez_0_392660937.html
https://www.lavozdigital.es/cadiz/20110310/opinion/dieguito-artista-tranquilo-20110310.html
https://www.bdfutbol.com/es/p/p.php?id=283968